
Superman (2025) marca el inicio de una nueva etapa para DC Studios. Con un enfoque más humano y menos centrado en la espectacularidad, la película se convierte en una meditación sobre el poder, la moral y la esperanza. Clark Kent, aún joven, se enfrenta a un mundo que ha perdido la fe en los símbolos. Su lucha no es solo contra enemigos externos, sino contra la desilusión colectiva.
La historia se desarrolla en un contexto global tenso, donde las acciones de Superman generan controversia. Su intervención en conflictos internacionales lo convierte en blanco de críticas, y el magnate tecnológico Lex Luthor aprovecha esta situación para manipular la opinión pública. Interpretado por Nicholas Hoult, Luthor no es un villano tradicional, sino un estratega que representa el poder sin ética, el pragmatismo sin compasión.
La narrativa se construye sobre el conflicto entre la herencia kryptoniana de Clark y los valores humanos inculcados por sus padres adoptivos. Este choque de identidades lo obliga a preguntarse qué significa realmente ser Superman. ¿Es suficiente tener poderes para ser un héroe? ¿O se necesita algo más profundo, como empatía, sacrificio y convicción?
Rachel Brosnahan interpreta a Lois Lane, quien aporta una dimensión emocional y crítica. Su relación con Clark no se basa en el romance superficial, sino en el respeto mutuo y en la búsqueda compartida de la verdad. Lois actúa como conciencia y contrapeso, recordándole que su fuerza no reside en sus habilidades, sino en su humanidad.
Visualmente, la película se aleja del exceso digital para abrazar una estética más sobria. La dirección de James Gunn se nota en los detalles: en las pausas, en los diálogos densos y en una banda sonora que acompaña sin invadir. La música, compuesta por John Murphy y David Fleming, refuerza los momentos clave con sutileza y profundidad.

La crítica ha respondido positivamente. Según Wikipedia, el filme ha sido el séptimo más taquillero del año, con más de 586 millones de dólares recaudados. Se destaca la actuación de Corenswet, quien logra transmitir vulnerabilidad y firmeza, y la química con Brosnahan, que aporta realismo a la relación entre Lois y Clark.
Además, la película ya está disponible en plataformas digitales como Amazon Prime Video y Apple TV. Este lanzamiento rápido ha permitido que más espectadores accedan a la historia desde casa, lo que ha impulsado aún más su popularidad. La estrategia de distribución refleja una nueva tendencia en la industria: acortar la ventana entre cine y streaming para satisfacer la demanda inmediata.
Superman (2025) no busca impresionar con explosiones, sino conmover con humanidad. En una era saturada de franquicias y fórmulas repetidas, esta película se atreve a mirar hacia adentro, a explorar la fragilidad detrás del mito. Es una obra que habla de esperanza, pero también de pérdida, de poder, pero también de responsabilidad.