Luis Callejo ha sido galardonado con la Espiga de Honor de la 70ª edición de la Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci), en el marco de la Gala de Cine de Castilla y León celebrada el 29 de octubre de 2025. El premio reconoce su trayectoria de casi treinta años como intérprete, con participación en más de un centenar de obras de teatro, cortometrajes, largometrajes y series.
A lo largo de su carrera, Callejo ha recibido tres nominaciones a los Premios Goya: mejor actor revelación en 2006 por Princesas, mejor interpretación masculina protagonista en 2017 por Tarde para la ira, y mejor actor de reparto en 2020 por Intemperie, de Benito Zambrano, película que inauguró la 64ª Seminci.
La entrega del galardón fue realizada por el consejero de Cultura, Turismo y Deporte de la Junta de Castilla y León, Gonzalo Santonja, tras las palabras del cineasta Benito Zambrano y de la actriz y guionista Marta Aledo, quienes destacaron su talento y compromiso con el cine español.
“Es el premio más bonito e importante que me han dado en la vida. Y lo asumo como una responsabilidad y un impulso hacia delante”, declaró el actor visiblemente emocionado. Durante su discurso, expresó su apoyo a los damnificados por la DANA y a la causa palestina, y dedicó la Espiga de Honor a todos sus maestros y compañeros de la RESAD. “Amo mi profesión porque es una de aprendizaje. Recomendad a vuestros hijos que sean actores y actrices; conocerán gente y verán mundo”, concluyó entre aplausos.
Callejo recordó que nunca planeó ser actor: su primer contacto con las artes escénicas fue durante un Erasmus en París, mientras cursaba la carrera de Derecho. Tras descubrir su vocación, se licenció en la Real Escuela Superior de Arte Dramático (RESAD) y comenzó a trabajar en cortometrajes junto a Sergio Barrejón y José Manuel Carrasco, antes de dar el salto al cine con El penalti más largo del mundo y El club de los suicidas, ambas de Roberto Santiago.
Desde entonces, ha participado en más de una treintena de largometrajes, entre ellos La mula, La herida, Palmeras en la nieve, Kiki, el amor se hace, El hombre de las mil caras, Tarde para la ira y Oro. En televisión, ha brillado en producciones como Apagón, Vestidas de azul, La chica de nieve y Berlín II.
Entre sus proyectos más recientes destacan La casa, de Álex Montoya; El cautivo, de Alejandro Amenábar; y Sin cobertura, de Mar Olid. Además, prepara el estreno de Sacamantecas, de David P. Sañudo, y La luz, de Fernando Franco. En 2026, volverá al teatro con el montaje La escopeta nacional, dirigido por Juan Echanove para el Teatro Español.
Durante la gala, Callejo comparó su oficio con una disciplina espiritual: “Actuar es un arte marcial. Tienes que estar en calma durante la tormenta, requiere mucho control mental. Es una profesión verdaderamente peculiar y yo quiero hacer esto hasta que me muera”, bromeó con una sonrisa.
La Gala de Cine de Castilla y León, presentada por el actor Borja Maestre, sirvió también para rendir homenaje al patrimonio audiovisual regional. La Filmoteca de Castilla y León proyectó dos cortometrajes restaurados: El canal de Castilla (1931), del pionero salmantino Leopoldo Alonso, acompañado por música en directo de J. Sasso, y El noveno, del aclamado Basilio Martín Patino, considerado una joya del cine español que permaneció desaparecida durante décadas.
Con esta gala, la Seminci reafirma su compromiso con el talento local y el legado cinematográfico de la comunidad, en un año en el que Castilla y León ha registrado 339 rodajes, un incremento del 28 % respecto al año anterior. @mundiario