Ganadora de la Concha de Oro del Festival de San Sebastián 2025, Los domingos ha sido aclamada como una de las obras más relevantes del cine español reciente. Dirigida por Alauda Ruiz de Azúa, la historia parte del deseo de una joven de 17 años, Ainara, de ingresar en un convento de clausura, lo que desencadena un intenso conflicto familiar.
Según la crítica de El País, el film “presenta un sobrio y ambiguo drama familiar” sobre fe y vocación, explorando la tensión entre laicos y creyentes en la España actual. Para Ruiz de Azúa, aunque no es creyente, el filme pretende abrir un “debate sobre la tolerancia” más allá de la religión.
La actriz Patricia López Arnaiz, en un papel imprescindible, logra dotar a su personaje de una humanidad que muchos críticos han elogiado. FilaSiete la describe como “una película que se posiciona entre lo mejor del cine español actual”.
No obstante, la recepción no ha sido unánime. En una crítica de El Antepenúltimo Mohicano se apunta que, pese a su pretensión de “objetividad”, la película carece de preguntas profundas sobre la religión contemporánea: “¿sobre qué tienen que posicionarse los espectadores?”, se pregunta la reseña.
Otros análisis, como el de La Razón, valoran la película con tres estrellas y media, alabando su ambición pero señalando que mantiene cierta distancia emocional entre los personajes.
En lo formal, Ruiz de Azúa apuesta por una estética contenida, texturas oscuras y planificación sobria que refleja la tensión latente del conflicto familiar. En una entrevista la directora confesó que trabajó para “difuminar la línea que separa lo familiar de lo eclesiástico” y construir un relato que invite a la reflexión más que al juicio.
Aun con sus matices críticos, Los domingos se presenta como un retrato necesario de la España contemporánea: una familia acomodada, prejuicios bienintencionados, un sistema educativo religioso y la elección radical de una joven que incomoda. El filme obliga al espectador a mirarse al espejo y plantear: ¿cuánto importa nuestra fe —o nuestra falta de ella— en la forma de amar y decidir?
En ese sentido, la película sobresale no solo como entretenimiento, sino como un proyecto cinematográfico que provoca preguntas, incomoda certezas y apuesta por un cine español valiente que navega entre la familia, la fe y la libertad. @mundiario