
La Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci) celebra su 70ª edición con la exposición Huellas y fugas. El cine español en Seminci, una muestra que invita al público a adentrarse en el proceso creativo de 16 películas nacionales incluidas en la programación del festival. La exposición estará abierta al público hasta el 19 de noviembre en la Sala de Exposiciones de San Benito.
Comisariada por el artista visual Ramón Isidoro y el director del festival, José Luis Cienfuegos, la exposición ofrece una mirada íntima a los materiales que dan forma al cine: guiones, objetos, vestuario, planos y maquetas originales que desnudan el proceso de investigación, documentación y creación de las películas seleccionadas.
Entre las piezas destacadas se encuentra la figura de cartón creada por un artista coreano para Tres adioses, de Isabel Coixet, adaptación del libro Tres cuencos de Michela Murgia, que inaugura esta edición de la Seminci. También se exhiben el dibujo que inspiró a Pere Vilà Barceló en Cuando un río se convierte en mar, los planos de Subsuelo de Fernando Franco y el faro roto de un coche junto al traje de bombero de Lionel, de Carlos Saiz.
En Golpes, de Rafael Cobos, el vestuario y los objetos —chaquetas, revistas y cajetillas de tabaco rubio— reconstruyen la España de los años 80, mientras que en Frontera, de Judith Colell, los abrigos y accesorios evocan el horror de los refugiados durante la Segunda Guerra Mundial. Otro de los elementos más llamativos es la copa de vino y la pierna romana de Anoche conquisté Tebas, de Gabriel Azorín, que mezcla pasado y presente en una mirada sobre la identidad y la memoria.
La exposición también incluye materiales cedidos por cineastas como David Trueba, que aporta una maqueta y una copia del guion de Siempre es invierno, su nueva adaptación cinematográfica; Lucía Aleñar Iglesias, que presenta el vestido simbólico de Forastera; o Irene Iborra, cuya maqueta protagoniza Olivia y el terremoto invisible, la primera película de animación en stop motion dirigida por una mujer en España.
Asimismo, se exponen los libros, pancartas y símbolos feministas de Este cuerpo mío, dirigida por Carolina Yuste y Afioco Gnecco; la peluca y el libro de La fábrica y el sexo, de María Ruido; y los objetos personales de Leo & Lou, de Carlos Solano, que condensan la esencia del viaje y la aventura.
La exposición culmina con el storyboard encuadernado de Bella, de Manuel H. Martín y Amparo Martínez Barco, una obra de animación que aborda el maltrato y la violencia emocional desde una mirada sensible y universal.
Huellas y fugas se erige así como un homenaje a la creación cinematográfica local: un espacio donde los objetos, lejos de ser simples recuerdos, se convierten en testigos de los mundos que habitan detrás de la pantalla. @mundiario