
No dejes a los niños solos, premiada en el festival de cine fantástico de Sitges
▲ Fotograma del filme No dejes a los niños solos, del mexicano Emilio Portes, que recibió la distinción de mejor película latinoamericana en la la pequeña localidad de la costa catalana.

▲ Escena de La hermanastra fea, una versión retorcida y sangrienta de la Cenicienta
Afp
Periódico La Jornada
Domingo 19 de octubre de 2025, p. 8
Sitges. No dejes a los niños solos, de Emilio Portes, fue premiada ayer en festival de cine fantástico de Sitges, donde La hermanastra fea, una versión retorcida y sangrienta de la Cenicienta, obtuvo el máximo galardón.
Con grandes dosis de humor negro y una mirada mordaz, la ópera prima de la directora noruega Emilie Blichfeldt cuenta el destino de la joven Elvira, cuya madre quiere casarla con el apuesto príncipe Julian pese a la competencia feroz de las más bellas del reino. La película le da la vuelta al cuento tradicional con una sátira brutal de un mundo dominado por la mirada masculina y unos cánones de belleza inalcanzables.
Todo ello utilizando los recursos del cine de horror para mostrar con crudeza las transformaciones del cuerpo de la joven protagonista (interpretada por Lea Myren), dispuesta a todo para gustar.
La directora, que ha confesado que hizo la película pensando en su propia juventud –”cuando tenía los pies grandes y poca confianza con chicos cerca”– convierte también en pesadilla la escena inmortalizada por Disney en la que el príncipe busca encajar a toda costa un zapato perdido con el pie de la misteriosa joven del baile.
El Festival de Sitges, referencia mundial del cine fantástico y de terror que se celebra cada año en la pequeña localidad de la costa catalana, también reconoció a No dejes a los niños solos con el premio Blood Window a la mejor película latinoamericana.
La cinta de Portes cuenta la historia de dos hermanos (interpretados por Juan Pablo Velasco y Ricardo Galina) que se quedan solos en una gran casa del México de los años 80 y se enfrentan al fantasma cruel de su antiguo ocupante.
El director explora la sicología infantil, las complicadas relaciones entre hermanos y arrastra al espectador a un viaje desenfrenando con un final negrísimo, sin olvidar una mirada crítica al México de la época.
La edición 58 del festival contó este año con invitados como el actor británico Benedict Cumberbatch o el director estadunidense Joe Dante, creador de los Gremlins y maestro del cine fantástico de los años 80.
Cumberbatch, conocido por la serie Sherlock y por su papel de Doctor Strange en el universo de los superhéroes de Marvel, presentó The Thing with Feathers (Esa cosa con alas), donde interpreta a un padre en duelo que lucha por criar a sus dos hijos mientras lidia con un cuervo que simboliza su dolor.
Sitges también acogió grandes producciones que aspiran a ser éxitos de taquilla, como el Frankenstein, de Guillermo del Toro (una de las grandes producciones de Netflix del año), el Drácula, del francés Luc Besson, o la nueva versión del clásico de la ciencia ficción El increíble hombre menguante, protagonizada por el oscarizado actor francés Jean Dujardin.
Tampoco faltó la tradicional Zombie Walk, un multitudinario desfile festivo de falsos muertos vivientes que recorren las estrechas calles de la ciudad.