
Con el estreno de Wicked: For Good programado para el 21 de noviembre, la actriz Marissa Bode ha revelado un importante cambio en la historia de su personaje, Nessarose, la hermana de Elphaba. En declaraciones a Go Magazine, Bode explicó que la película ha modificado uno de los elementos más criticados del musical original de Broadway para eliminar un enfoque considerado capacitista.
En la obra teatral, el deseo de Nessa —quien usa una silla de ruedas— era poder caminar, y su hermana Elphaba la ayudaba encantando sus zapatos. Sin embargo, en la película dirigida por Jon M. Chu, el hechizo no le da la capacidad de andar, sino de volar, un cambio que Bode celebra por su significado simbólico y su sensibilidad hacia las personas con discapacidad.
“Estoy muy feliz con el cambio. La narrativa anterior estaba desactualizada”, afirmó la actriz, quien interpreta nuevamente a Nessa en esta segunda parte. “Todos merecen una oportunidad de volar”.
Detrás de Wicked for Good
La decisión vino tras una conversación entre Winnie Holzman, guionista del musical y coautora del filme, y una amiga suya con discapacidad, que le ayudó a replantear la historia de manera más respetuosa y moderna.
Bode también destacó que la nueva versión muestra con mayor realismo las dinámicas cotidianas de las personas con discapacidad: “A veces sí necesitamos ayuda, pero no siempre. Lo importante es no asumirlo. Todos somos diferentes y tenemos distintos niveles de movilidad”, señaló.
En esta entrega, Nessa sigue siendo la gobernante de Munchkinland y futura Bruja Mala del Este, pero ahora su arco gira en torno al amor, la independencia y la búsqueda de aceptación, en lugar de su limitación física.
Con Cynthia Erivo como Elphaba y Ariana Grande como Glinda, Wicked: For Good cerrará la adaptación cinematográfica del clásico musical con una mirada más inclusiva y esperanzadora, reafirmando el lema que da nombre a su nueva versión: “Todos merecen una oportunidad de volar”. @mundiario