
El thriller psicológico dirigido por Lynne Ramsay se perfila como una de las películas más inquietantes del año. Tras su paso por Cannes, Die My Love llega rodeada de polémica y expectación. La cinta, producida por Black Label Media y distribuida por MUBI, adapta la novela homónima de Ariana Harwicz, una historia que aborda los límites de la maternidad, la cordura y el deseo de escapar de uno mismo.
Jennifer Lawrence interpreta a Grace, una mujer que, tras mudarse al campo con su esposo (Robert Pattinson) y su hijo recién nacido, comienza a perder la noción de la realidad. La película explora la depresión posparto desde una perspectiva brutalmente honesta, con la sensibilidad visual característica de Ramsay, quien combina atmósferas claustrofóbicas con poesía visual.
En Cannes, Die My Love dividió a la crítica. Medios como The Guardian y Variety la elogiaron por su intensidad emocional y su enfoque estilizado, mientras que otros la calificaron de excesiva y desbordante. Aun así, Lawrence fue alabada por una interpretación visceral que muchos consideran una de las más complejas de su carrera.
El filme también ha generado interés por su trasfondo personal: Lawrence rodó la película embarazada de su primer hijo. “Parte de lo que vive mi personaje tiene que ver con la identidad y la pérdida de sí misma. Yo estaba en el extremo opuesto: feliz, luminosa y con todas las hormonas del mundo”, explicó la actriz durante el festival.
Rodada en 35 mm por Seamus McGarvey, la cinta se inspira en referentes del horror psicológico como Repulsion y El bebé de Rosemary. Con secundarios de lujo como Sissy Spacek, LaKeith Stanfield y Nick Nolte, Die My Love llegará a los cines de Estados Unidos el 7 de noviembre de 2025 y a España una semana después, el 14 de noviembre.
Más que un drama, Die My Love es un descenso poético al caos mental y emocional de la maternidad, una exploración de la femeneidad desde el abismo. Veremos cómo lo recibe el público. @mundiario