
El 6 de octubre de 1951, dos jóvenes cineastas —Luis García Berlanga y Juan Antonio Bardem— terminaron de rodar en Madrid una cinta que cambiaría para siempre la historia del cine español. Setenta y cuatro años después, su ópera prima conjunta, Esa pareja feliz, ha sido la protagonista del Día del Cine Español 2025, una celebración que reconoce la valentía de sus autores y la lucidez con la que retrataron la realidad social de la posguerra.
Esa pareja feliz narra la historia de Juan (Fernando Fernán Gómez), un técnico de cine que sueña con ascender socialmente, y Carmen (Elvira Quintillá), su esposa, una mujer sencilla que solo aspira a la estabilidad del amor cotidiano. A través de su vida modesta en una pensión madrileña, la película expone la precariedad económica y las frustraciones de la clase trabajadora bajo el franquismo.
Aunque fue rodada en 1951, la cinta no se estrenó hasta 1953, después de que la Junta de Clasificación la considerara de “segunda categoría”. Según la Filmoteca Española, la demora no fue por censura directa, sino por la dificultad de su distribución: los exhibidores temían que su tono social resultara incómodo en plena dictadura.
Berlanga y Bardem, influenciados por el neorrealismo italiano y la sátira costumbrista española, combinaron el drama y la comedia en un equilibrio inusual para la época. Bajo la apariencia de una historia ligera, Esa pareja feliz escondía una crítica al conformismo, al sueño imposible de prosperar y a la desigualdad de la España de posguerra.
Esa pareja feliz fue germen del nuevo cine español
Años más tarde, Bardem recordaría que aquella película fue “el primer intento de mostrar la vida tal y como era, sin adornos ni consignas”. En ese sentido, la película se considera el preludio de obras mayores como ¡Bienvenido, Mister Marshall! (1953) o Calle Mayor (1956), que consolidaron el nuevo realismo social español.
Durante su rodaje, los jóvenes directores —de 29 y 30 años— ya mostraban sus diferencias creativas: Berlanga tendía hacia la ironía y la farsa, mientras Bardem apostaba por la denuncia política y la estructura neorrealista. Aun así, el resultado fue un equilibrio tan peculiar como pionero.
Tras décadas de relativa invisibilidad, la película fue restaurada por la Filmoteca Española y reestrenada en plataformas como FlixOlé, donde puede verse actualmente. La Academia de Cine destaca que su importancia radica no solo en su calidad artística, sino en haber abierto una grieta dentro de un sistema cinematográfico dominado por la propaganda franquista.
El Ministerio de Cultura y Deporte de España ha dedicado el 6 de octubre de 2025 —fecha oficial del Día del Cine Español— a Esa pareja feliz, reivindicándola como una obra “irrepetible y fundacional”, que refleja el ingenio, la resistencia y el espíritu crítico que caracterizarían a las generaciones posteriores de cineastas.
“La película es una metáfora sobre la ilusión del progreso en un país empobrecido, pero también una historia de amor sencilla y universal”, señala un comunicado del Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA).
Setenta años después, la cinta mantiene su vigencia como documento social y como testimonio de una generación que, pese a la censura y las limitaciones materiales, logró construir una mirada propia. Esa pareja feliz no es solo la obra debut de dos de los mayores nombres del cine español; es el reflejo de una época en la que rodar una película podía ser un acto de resistencia. @mundiario