
▲ El escritor Guillermo Arriaga (izquierda) y el director del emblemático filme mexicano, Alejandro González Iñárritu, en Bellas Artes.Foto cortesía de los organizadores
Ana Mónica Rodríguez
Periódico La Jornada
Martes 7 de octubre de 2025, p. a39
Considerada un parteaguas en el cine mexicano contemporáneo, Amores perros celebró su aniversario 25 con una función especial en el Palacio de Bellas Artes y la presencia de su director, Alejandro González Iñárritu, quien se reconcilió fraternalmente con Guillermo Arriaga y dijo que la cinta “sólo era una idea y nada estaba asegurado; fue un acto de fe, de locura, sin expectativas, cálculos razonables, diseños o algoritmos”.
El realizador, ganador de un premio Oscar, sostuvo: “La inocencia fue nuestra herramienta, que siempre será más poderosa que la experiencia. Fue un viaje dictado por las entrañas y la profunda necesidad compartida de todos los que hicimos esta película, por la que hoy estamos aquí presentes”.
La resonancia y vigencia de una obra “están ligadas a la capacidad que tiene de irse transformando permanentemente a lo largo del tiempo; el soplo de vida de ésta nació con el guion fundamental de Guillermo Arriaga, así como con el pedazo de corazón de cada actriz, cada actor, jefe de departamento y de cada uno de los integrantes del equipo”.
Amores perros, agregó, “ya no es nuestra ni de nadie: es parte de la memoria colectiva del país; cine e identidad entrelazados, que es el mejor premio que podemos recibir. Para mí es un mosaico de un país en trance, de belleza, ternura, desigualdad, violencia, deseo, inocencia, dolor, traición y la continúa búsqueda de un padre que todavía no hemos encontrado”.
Es “una película profundamente humana. Amores perros es una proyección de nosotros mismos; un país perro lleno de amor, en eterna contradicción que somos; una herida abierta, como la que lleva el perro Cofi dentro del automóvil, en la primera escena de la película, donde se huye con terror de esa violencia que aún nos persigue a todos”.
El filme “entrelaza lo histórico y temporal, lo local y lo universal, lo artístico y lo político a su manera y lo individual con lo colectivo”.
Luego de recordar a quienes no pudieron asistir a la celebración, así como a aquellos que ya no están en el plano terrenal y que formaron parte del equipo de producción, dijo: “Su corazón y trabajo han quedado para siempre impregnados en esta película”.
Después, el galardonado cineasta expresó: “Desafortunadamente, hace 20 años hubo una fractura, una separación muy dolorosa originada por diversos puntos de vista, pero también azuzada por otras personas e intereses; sin embargo, esta coyuntura de los 25 años de la realización ha sido el marco perfecto para hacer a un lado nuestras diferencias y rencontrar ese cariño profundo en un mundo lleno de odio e intolerancia; y hemos decidido reconstruir esa hermandad que siempre tuvimos. Les tengo una sorpresa: démosle un aplauso muy grande a mi querido hermano y talentoso escritor Guillermo Arriaga”.
Santaolalla y Bosé, presentes
La sala principal de Bellas Artes, entonces, vibró con los aplausos y gritos de la audiencia que incluyó a muchos de los actores y actrices del filme (Gael García Bernal, Vanessa Bauche y Adriana Barraza, entre otros); del equipo creativo; invitados de la industria cinematográfica; funcionarios, y artistas y cantantes, entre ellos, Gustavo Santaolalla y Miguel Bosé.
Luego de las palabras de González Iñárritu, su emblemática ópera prima se proyectó en una versión con imagen restaurada y sonido que Criterion Collection, Estudio México Films y Altavista Films realizaron en 2020 a partir del negativo original de cámara de 35 mm, con escaneo a una resolución 4K de 16 bits.
Luego de la función, el compositor Gustavo Santaolalla interpretó parte de la música que acompañó momentos clave del filme, así como otras de sus obras.
En su estreno, Amores Perros se convirtió en una de las cintas mexicanas más exitosas. Fue galardonada con 11 premios Ariel, incluidos mejores Película y Director. A nivel internacional, obtuvo el premio Bafta a Mejor película en lengua no inglesa, otorgado por la Academia Británica de las Artes Cinematográficas y de la Televisión; así como el premio de la crítica del Festival de Cine del Festival Cannes, en Francia. Además, recibió una nominación al Oscar por Mejor película de habla no inglesa (otorgado por la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Estados Unidos).