
Adaptación del libro Ce qu’il faut de nuit de Laurent Petitmangin, el filme se centra en Pierre Hohenberg, un padre que cría solo a sus dos hijos tras la muerte de su esposa, y en la creciente distancia con su hijo mayor, Fus, atrapado en grupos de extrema derecha.
La trama se desarrolla en Villerupt, un entorno industrial marcado por los altos hornos y la tradición ferroviaria, donde Pierre compagina su trabajo en la industria con la educación de sus hijos. Louis, el hijo menor, destaca académicamente y emprende estudios universitarios en la Sorbona, mientras que Fus se muestra más temperamental y, con el tiempo, se aleja de la influencia paterna, acercándose a grupos ultras que promueven la violencia en las calles y encuentros deportivos. La película muestra cómo la ideología de estos grupos se infiltra en la mente de los jóvenes, desafiando los valores de solidaridad y apertura que Pierre ha transmitido desde la infancia.
Jugar con fuego se centra en la relación entre Pierre y Fus, explorando el conflicto entre el amor familiar y la incomprensión ante la deriva ideológica del hijo. Vincent Lindon interpreta a Pierre, mientras que Benjamin Voisin da vida a Fus y Stefan Crepon a Louis, el hijo que sigue el camino contrario al de su hermano. El filme no simplifica la cuestión de la radicalización ni reduce a los personajes a estereotipos, sino que ofrece un retrato naturalista de la tensión entre la familia y la influencia de movimientos extremistas, mostrando la complejidad de la adolescencia en un contexto sociopolítico contemporáneo.
Las directoras Delphine y Muriel Coulin, reconocidas por su trabajo en 17 Filles, aplican un enfoque intimista que refleja la decepción de los padres frente a las decisiones de sus hijos, enmarcándolo en un espacio marcado por los valores progresistas y sindicales. La película examina cómo la radicalización se infiltra incluso en entornos de ideología abierta y solidaria, y cómo la familia se convierte en el espacio donde se enfrentan el miedo, la incomprensión y el apoyo incondicional.
El guion fue escrito por las hermanas Coulin, basándose en la novela de Laurent Petitmangin, y busca mostrar la realidad del auge del nacionalismo en Francia a través de la intimidad familiar, en un paralelo invertido con obras como American History X. La dirección de fotografía, la ambientación industrial de Villerupt y la construcción de la narrativa están pensadas para reflejar la sensación de aislamiento y la influencia del entorno sobre la juventud, mientras que la música y la edición contribuyen a acentuar el drama familiar y social.
Jugar con fuego se estrenará en cines el 10 de octubre con la distribución a cargo de Flamingo Films en España y proyecciones previstas en cines nacionales desde esa fecha. La película combina el drama familiar con un análisis de las tensiones sociales contemporáneas, ofreciendo una mirada detallada sobre la influencia de la extrema derecha en los jóvenes y el papel del entorno familiar en la formación de sus valores. @mundiario