
De regreso de su retiro profesional, Daniel Day-Lewis ha hablado abiertamente sobre su visión de la actuación, y no se guarda sus críticas hacia el famoso Método. En una entrevista reciente con The New York Times, el actor, tres veces ganador del Oscar, afirmó que no le gusta pensar en la actuación en términos de oficio en absoluto, argumentando que centrarse demasiado en el proceso desvía a los artistas hacia los detalles menos importantes del trabajo.
El actor británico-irlandés fue directo al señalar cómo se percibe la técnica de la inmersión total. «Por supuesto, hay técnicas que puedes aprender, y sé que el Método se ha convertido en un blanco fácil en estos días», declaró. Day-Lewis expresó su molestia por el uso de la expresión método completo, que, según él, implica que una persona se está comportando como un lunático de una manera extrema.
Day-Lewis explicó que la atención pública tiende a centrarse en el aspecto más performativo y dramático de la preparación actoral. «Todo el mundo tiende a centrarse en los detalles menos importantes de la obra, y esos detalles siempre parecen implicar algún tipo de autoflagelación o una experiencia que se impone a uno mismo una grave incomodidad o inestabilidad mental», comentó. No obstante, el actor defendió que, en la vida real de un intérprete, la esencia del trabajo debe residir en la introspección: tiene que ser principalmente sobre el trabajo interno.
Regreso al cine con su hijo
Day-Lewis se había retirado oficialmente de la actuación en 2017, poco antes del estreno de El hilo invisible (Phantom Thread), su segunda colaboración con Paul Thomas Anderson. En ese momento, su representante declaró que la decisión era privada y que el actor estaba inmensamente agradecido con todos sus colaboradores y audiencias.
Recientemente, el actor regresó a la pantalla grande al protagonizar Anemone, un drama independiente dirigido por su hijo, Ronan. En la película, Day-Lewis interpreta a Ray, un ex soldado británico convertido en recluso, cuya vida tranquila se ve alterada cuando su hermano (Sean Bean) lo localiza y lo obliga a confrontar un complicado pasado.
En declaraciones a Variety, Day-Lewis describió la colaboración con su hijo como una progresión natural de su relación, señalando que han sido colaboradores de toda la vida. «A lo largo de los años, desde que Ronan era muy, muy pequeño, hemos trabajado juntos en muchas cosas diferentes», dijo. «Siempre hubo una gran facilidad en la compañía del otro, y esto fue realmente una extensión de eso. Era solo una caja de juguetes más grande para jugar».