
Distribuida por VerCine, la cinta está centrada en los últimos años de la vida de Bernhardt y busca mostrar su trayectoria artística, sus relaciones personales y su lucha por mantener su estatus en el teatro pese a los obstáculos físicos y sociales. La película ha sido nominada a dos premios César: Mejor Diseño de Producción y Mejor Diseño de Vestuario.
La película explora la vida de Sarah Bernhardt desde su juventud hasta su consagración como la primera celebridad global del mundo del teatro, abarcando desde finales del siglo XIX hasta comienzos del XX. Sandrine Kiberlain interpreta a Bernhardt con un enfoque íntimo y emocional, acompañada por Laurent Lafitte, que da vida a Lucien Guitry, su padre, y Lauren Lafitte, en el papel de un personaje cercano en la vida de la actriz. La cinta muestra la relación de Sarah con su entorno personal y profesional, así como sus amoríos con Edmond Rostand y Louise, interpretada por Amira Casar, revelando su capacidad para combinar vida artística y afectiva con determinación y ambición.
La historia se centra en el periodo en el que Bernhardt, ya consagrada, enfrenta los desafíos de su carrera y su vida personal. La película retrata escenas icónicas, como la interpretación de La dama de las camelias en el Théâtre de la Renaissance, así como momentos de gran intimidad y dolor, incluyendo la recuperación tras la amputación de una pierna en 1915, cuando comparte con Sacha Guitry reflexiones sobre el amor perdido y su filosofía de vida artística: transmitir sufrimiento para que el público sienta emoción.
Sarah Bernhardt nació en 1844, hija de una cortesana neerlandesa de origen judío y de Edouard Bernard, cuya identidad se mantuvo oculta durante años. Enfermiza y temperamental, pasó parte de su infancia con una tía y estudió en un colegio católico en Versalles antes de ingresar al Conservatorio de Música y Drama a los 16 años, con el apoyo de un protector de su madre. La película muestra cómo su formación, su carácter y su talento la convirtieron en una figura única, capaz de llenar teatros y codearse con las élites culturales y políticas de Europa, Reino Unido, Estados Unidos y América Latina.
Guillaume Nicloux aborda la vida de Bernhardt destacando su carácter adelantado a su tiempo, su libertad y su capacidad de desafiar normas sociales, políticas y culturales. La película combina un riguroso trabajo de ambientación histórica con un enfoque narrativo que mezcla intimidad y espectáculo, mostrando a Bernhardt no solo como artista, sino también como mujer que supo navegar los desafíos de su época con audacia y talento. La narrativa se centra en su vida profesional y personal, retratando su relación con su padre, sus amantes y su compromiso inquebrantable con el arte escénico, estableciendo un equilibrio entre la grandeza de su fama y la vulnerabilidad de sus experiencias personales. @mundiario