
El Festival Internacional de Cine de San Sebastián 2025 recibió a Gia Coppola como miembro del jurado oficial y protagonista de una de las esperadas Film Talks. La directora de The Last Showgirl, producción de A24, compartió su experiencia en el cine y reflexionó sobre el peso de crecer en una familia marcada por nombres como Francis Ford Coppola, Sofia Coppola y Roman Coppola.
Durante la charla, la cineasta reveló anécdotas personales junto a su abuelo Francis, recordando cómo lo asistió en el rodaje de Twixt (2011). Entre risas, contó cómo aprendió de él a enfrentar los desafíos con calma, incluso cuando la realidad parecía superar la ficción.
Un tema recurrente fue la relación entre la familia Coppola y la ausencia de Nicolas Cage en sus proyectos. “Me encantaría trabajar con él, pero está tan ocupado”, comentó entre bromas, al tiempo que lo reconoció como uno de sus actores favoritos.
Pamela Anderson y Jamie Lee Curtis, pilares de The Last Showgirl
Gia Coppola también habló de su más reciente película, The Last Showgirl, en la que Pamela Anderson y Jamie Lee Curtis interpretan a coristas en decadencia en el Las Vegas contemporáneo. Según la directora, Anderson rechazó inicialmente el guion, pero tras recibirlo de parte de su hijo, no dudó en aceptar el reto. El resultado: una de sus actuaciones más aplaudidas en el terreno dramático.
Jamie Lee Curtis, por su parte, se unió al proyecto poco después de haber ganado el Óscar por Everything Everywhere All at Once (2022). Lejos de cualquier divismo, la actriz demostró su pasión por el cine independiente, apoyando al equipo en un rodaje guerrilla que sorprendió incluso a Coppola. “Era impresionante verla mover equipo y compartir su energía con todos”, relató la directora.
Coppola no descartó la posibilidad de una secuela: imaginó una cinta de atracos donde los personajes de Anderson y Curtis planean robar un casino en Las Vegas. Un guiño divertido a su versatilidad como narradora y a su interés en combinar drama y entretenimiento.
Inspiración, cine y nuevas generaciones
En San Sebastián, Gia Coppola también compartió los referentes cinematográficos que marcaron su vocación. Aunque admira los clásicos de su familia, destacó la influencia de cineastas modernos como David Fincher y Paul Thomas Anderson, cuyo trabajo despertó en ella el deseo de convertirse en directora.
Además, reflexionó sobre cómo la maternidad le ha dado menos tiempo para la autocrítica, lo que le permite trabajar con mayor naturalidad y confianza en sus proyectos. Su participación en el festival consolidó su lugar como una voz relevante dentro del cine independiente actual, capaz de mantener el legado Coppola mientras define su propio estilo.