
Con una duración de 92 minutos, el filme propone una experiencia intensa y dinámica, alejada de las producciones extensas que dominan actualmente las salas. Persecuciones, tiroteos, mafias y una buena dosis de humor negro son los elementos centrales de esta propuesta que busca atraer tanto a los aficionados al género como a los nostálgicos del videoclub.
La historia sigue a Ray Hayes, interpretado por Kevin James, un expolicía que lleva una vida doble. De día es un padre de familia aparentemente ejemplar; de noche trabaja como sicario para la mafia, especializado en cobrar deudas pendientes. Su vida se complica cuando un encargo falla estrepitosamente y la aparición de un nuevo y sádico líder criminal amenaza la seguridad de su familia. Obligado a huir, Hayes se verá inmerso en una espiral de violencia y acción que pondrá a prueba sus habilidades y su determinación.
El papel de Kevin James marca una nueva incursión del actor en el cine de acción tras sorprender en 2020 con Becky, donde interpretó a un neonazi implacable. Conocido por su trayectoria en comedia, en producciones como El rey de Queens o sus colaboraciones con Adam Sandler, el intérprete se adentra de nuevo en terrenos más oscuros y físicos, construyendo un personaje que recuerda a los antihéroes clásicos del género.
Christina Ricci acompaña a James en esta producción con un papel que añade tensión y complejidad al desarrollo de la trama. El reparto se completa con Luis Guzmán y Francis Cronin, aportando diversidad y carisma a un elenco diseñado para reforzar el tono dinámico de la película.
Fritos a balazos destaca por su estilo visual y narrativo, con coreografías de lucha precisas, diálogos ágiles y una estética que homenajea al cine de acción de videoclub. La cinta no pretende reinventar el género, sino recuperar una fórmula clásica que prioriza el entretenimiento inmediato y la energía narrativa. La mezcla de acción intensa, humor negro y personajes carismáticos crea una propuesta pensada para un público que busca evasión y ritmo.
La película llegará exclusivamente a cines en España el 12 de septiembre, reforzando la tendencia de estrenos que apuestan por experiencias de acción compactas. Con su duración ajustada y su tono directo, Fritos a Balazos se presenta como una alternativa fresca frente a las producciones más largas y complejas, reivindicando la vigencia del cine de género en su formato más clásico. @mundiario