
Cuando hablamos de Naruto, lo primero que se viene a nuestra mente es el anime o el manga, ambos de Japón; sin embargo, el famoso ninja guarda una profunda conexión con Hollywood que pocos conocen.
Y es que cuando se piensa en el mundo de Naruto, es difícil imaginar que la meca del cine haya influido en su creación.
Pero, su creador Masashi Kishimoto reveló que un famoso actor sirvió de inspiración para uno de sus personajes. A continuación te contamos de quién se trata.
El vínculo inesperado entre Hollywood y Naruto
Pocos lo saben, pero uno de los personajes más emblemáticos de Naruto tiene una conexión directa con Keanu Reeves. El vínculo entre el universo ninja creado por Kishimoto y el actor canadiense surgió de una chispa inesperada: Matrix.
La conexión se remonta a la época en que se estrenó la primera película de la saga (1999), causando un impacto cultural masivo en todo el mundo, incluido Japón.
Kishimoto, un confeso admirador del cine, quedó cautivado por la estética futurista y, en particular, por el estilo de Neo, el personaje interpretado por Keanu Reeves.
La estética de Neo llevada a la arena
Según reveló el propio Kishimoto en una entrevista poco conocida citada por IGN, fue la interpretación de Keanu Reeves como Neo lo que lo inspiró a rediseñar a Gaara, el shinobi de la Arena, durante las primeras etapas del manga.
Para Naruto Shippuden, Kishimoto quería darle una apariencia más madura y misteriosa que reflejara su evolución como personaje. Fue entonces cuando las gabardinas largas y el estilo de combate de Neo se convirtieron en la fuente de inspiración perfecta.
Kishimoto tomó la esencia de la película y la adaptó al mundo de Naruto, dando a Gaara un atuendo que evoca la sofisticación y la seriedad del personaje de Reeves.
El homenaje a Keanu fue completo
Pero no solo fue el atuendo, la mirada distante, su caminar estoico, su tendencia al silencio, y su evolución de villano a salvador del mundo ninja tienen un aire inconfundible de elegancia sombría, similar a la del protagonista de Matrix.
Incluso el símbolo de «amor» que Gaara lleva en la frente representa su conflicto central: la lucha entre la destrucción y la empatía, la misma dualidad que enfrenta Neo al decidir entre el sistema y la humanidad.
Kishimoto también confesó que la postura clásica de Gaara al controlar la arena con una sola mano suspendida, con la otra siempre lista para atacar, fue una reinterpretación libre de las famosas escenas en cámara lenta de Reeves esquivando balas.
Así que la próxima vez que veamos a Gaara enfrentarse a sus demonios internos o usar la arena como escudo y espada, pensaremos también en Keanu Reeves vestido de negro, moviéndose entre códigos verdes.