Luis Malagón habla sobre su presente en América y el Tri

Aunque trabaja en el sueño de jugar la Copa del Mundo 2026 con la Selección Mexicana, el presente que vive Luis Malagón en todos los aspectos de su vida es inmejorable; su bebé, el motor de su vida.

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Realmente debes de ser consciente del lugar donde estás, son años de sacrificio, de momentos difíciles, ya tengo 15 años lejos de mis papás, no hay un día donde no extrañe la comida de mi mamá, pero cuando te pagan por futbol es mágico. Descanso, cuido la alimentación, te privas de cosas, somos jóvenes, me gusta la fiesta, pero se disfrutan mucho los viajes, decía Zendejas -es mi roomie-, parece que nunca nos terminamos de conocer, es bonito esto, el futbol y la música están conectados, es una pasión que nos une”.

Compartió también las dificultades de sus inicios, en los que sobrellevó el delicado estado de salud de su madre, además de las dificultades económicas.

A los 16 años a mi mamá le dieron infartos cerebrales, no le daban posibilidades de seguir con vida, a partir de ahí aprendí a valorar un abrazo, un taco, una palabra, Dios sabe por qué nos tiene aquí, somos afortunados. Hay gente que pasa por circunstancias complicadas, le agradezco a mi mamá por haberse levantado de esa cama, hoy soy papá y sé lo que es el amor a primera vista, no sabes lo maravilloso que es; agradecer a Dios lo que tengo hoy día”, dijo el cancerbero de 28 años.

Por último, el originario de Zamora, Michoacán, extendió un consejo a quienes siguen sus pasos.

Nunca se rindan, siempre he dicho que tu peor enemigo eres tú mismo, la cabeza te puede jugar chueco, todo en la vida se puede lograr, todo es con base al amor de mis hermanos, papás, de Dios, no perderse, la fama es difícil, dejar todo en las manos del que tú creas, no perder tu esencia, el día que dejas de ser quién eres, todo se va a la basura, aprender de los que más amas y nunca dejar de trabajar”.

BFG