El verano de 2025 promete ser un verdadero festín para los amantes del anime, y Studio Ghibli no piensa quedarse atrás. Como ya es casi tradición en esta época del año, una de sus películas más emblemáticas regresa a la pantalla grande. Esta vez, se trata de Porco Rosso, una aventura inolvidable dirigida por Hayao Miyazaki que vuelve a los cines españoles a partir del 18 de julio.
Aunque Ponyo en el acantilado también tiene programado su reestreno para agosto, la cita más cercana es con este cerdo aviador que conquistó a crítica y público desde su estreno original en 1992. Porco Rosso es una carta de amor a la aviación, tejida con melancolía, humor y un diseño visual espectacular. Es, sin duda, una de las películas más personales de Miyazaki, en la que anticipaba su fascinación por los aviones que más tarde profundizaría en El viento se levanta.
La historia nos lleva a la Italia de entreguerras, donde conocemos a Marco, un antiguo piloto de combate que, tras sobrevivir a la Primera Guerra Mundial y desencantarse profundamente con la humanidad, es víctima de una extraña maldición: su rostro ha adoptado la forma de un cerdo. Bajo el seudónimo de Porco Rosso, trabaja ahora como cazarrecompensas en el mar Adriático, protegiendo a civiles de los piratas del aire que siembran el caos desde sus aeronaves.
Pero su solitaria rutina se ve interrumpida cuando los piratas, cansados de sus constantes interferencias, contratan a un arrogante piloto estadounidense para acabar con él. A partir de ahí, se desarrolla una historia llena de acción aérea, humor y reflexión sobre la identidad, la guerra y la redención, todo con la poesía visual que caracteriza a Ghibli.
La vuelta de Porco Rosso a los cines españoles incluirá funciones tanto en versión original como dobladas al castellano, aunque la disponibilidad variará según la sala. Es una oportunidad única para revivir esta maravilla animada en pantalla grande, tal como fue concebida, o para descubrirla por primera vez si nunca la viste.
Si hay algo que distingue a Porco Rosso es su capacidad para hablar tanto a adultos como a jóvenes. Es un filme que combina acción y ternura, sátira política y romanticismo nostálgico, en una mezcla tan inusual como memorable. Así que si este julio estás buscando una experiencia cinematográfica diferente, no lo dudes: vuelve a volar con Porco. @mundiario
